domingo, 9 de agosto de 2009

Ashes of Time Redux: El pasado de WKW

Barnizando el pasado

(Ashes of Time Redux, WKW, 2008)


Saliendo de la proyección de la insignificante The Broken (Sean Ellis, 2008) en el último festival de Sitges, un amigo vinculado al campo de la realización me advertía que, pese a lo endeble de la propuesta, apenas unos pocos periodistas acreditados habían decidido abandonar la sala en mitad de la sesión. Él atribuía este hecho inaudito a la metalizada fotografía de Angus Hudson que conseguía atrapar al espectador hasta el punto de mantenerlo adherido a su butaca. Pocas semanas antes y, a propósito de una charla post-proyección de El cant dels ocells (2008) en San Sebastián, Albert Serra argumentaba que una de las claves del éxito crítico de Honor de cavalleria (2006) no se hallaba en el relato en sí sino en los fascinantes rostros de sus dos protagonistas. “Nunca te cansarías de mirarlos en primer plano”, aseguraba. Una sensación similar a la causada por este par de ejemplos dispares me invadió al visionar Ashes of Time Redux, un trabajo desigual que, sin embargo, nos invita a reflexionar sobre el poder de atracción de ciertas imágenes ante las que resulta harto difícil apartar la mirada...


Texto íntegro en Miradas



2 comentarios:

M. Jordan dijo...

Es casi imposible hablar de Wong sin decir algo de Doyle, ¿verdad? Muchos tienen (¿tenemos?) la sensación de que tras este director de fotografía se encuentra gran parte del hechizo de las películas que dirige Wong Kar-Wai.

Por cierto, yo SÍ me salí de The broken... XD

Carles Matamoros dijo...

En el caso de Doyle, está claro, Mónica. Pero me pregunto hasta qué punto nos damos cuenta de la relevancia del director de fotografía en la forma de las películas. Si los gionistas son los grandes olvidados, los cinematographers (jeje) no les andan ni mucho menos a la zaga.

Veo que el hechizo de The Broken no funciona igual paera todos.Y mira que es una peli chorra, chorra.Pero yo me quedé en la sala...