lunes, 16 de febrero de 2009

El (curioso) caso de David Fincher

A propósito del estreno de El curioso caso de Benjamin Button, en la renovada (aún en su versión beta) Miradas de Cine publicamos un extenso estudio sobre la figura de David Fincher; un cineasta muy interesante ante el que yo, personalmente, aún tengo ciertos reparos. En esta ocasión no participo explícitamente del especial de la revista, pero sí escribo la crítica de la última película del director en cuestión; un filme que ha despertado todo tipo de opiniones encontradas y que a mí, pese (o gracias a) sus considerables defectos, me ha convencido lo suficiente como para defenderlo en mi artículo. La polémica está servida. ¿Alguien se apunta a discutir?


3 comentarios:

Jesús Cortés dijo...

A mí Carles me ha parecido quizá la peor película de Fincher y no acierto a comprender lo que dicen de ella en muchos medios. Debe ser un problema mío, imagino. Me gustó "Seven" y me pareció buena a pesar del exceso de metraje "Zodiac", del resto creo que se ha exagerado mucho.
Creo que es una película truquista, aburrida y deforme, un disparate ejecutado con muy poca brillantez técnica a pesar de tanto fuego de artificio.
Se salva de la quema la interpretación de Julia Ormond, una actriz del todo desaprovechada.
Entiendo que la nombres en tu artículo junto a "Changeling", pero me temo que Fincher debería morir y renacer 7 veces no ya para conseguir, sino para atreverse a contar algo con la desnudez y el clasicismo de Eastwood. "Gran Torino" aún más que "Changeling" le saca tantos cuerpos de ventaja a cualquier cosa que haya hecho Fincher, que ni aparece su caballo por la recta de meta.

Carles Matamoros dijo...

Hola Jesús,

No creas que es un problema tuyo. Yo conozco a bastante gente que le ha disgustado (mucho)esta peli y que no comprende tantas alabanzas. A mí, sin deslumbrarme, me ha parecido interesante por varios aspectos que comento en el artículo, pero si buscase argumentos en contra me la podría haber cargado perfectamente. Supongo, que todo depende del estado de ánimo, de la honestidad con uno mismo (la disfruté bastante) y de intentar ver el vaso medio lleno o medio vacío.

Ardo en deseos de ver Gran Torino. Espero que no me decepcione.

Por lo demás, pienso que la peor película de Fincher es "La habitación del pánico", puro exhibicionismo formal para la más absoluta vacuidad. Ya te digo que tampoco es que sea muy fan de sus pelis...El calificativo de obra maestra para Benjamin Button se me antoja incomprensible, pero, bueno, en esa diversidad está la gracia de la libertad de expresión.

Saludos

Jesús Cortés dijo...

"Gran Torino" es un Eastwood "de perfil bajo" como se dice ahora, nada de grandes asuntos y grandes conclusiones. Es un pequeño film duro, real y con un riesgo enorme de autocaricatura que se salva con la herramienta más poderosa que posee el cine: verdad.