Los días pasan y se suceden los lanzamientos potentes en dvd. En este último mes he escrito sobre películas desiguales (en interés e importancia) en Cinearchivo. A continuación, os dejo los enlaces. Pero eechar un vistazo a lo los lanzamientos navideños que nos llegan: Branded to kill, Shoah, La imagen errante... ¿Acaso empezaremos a dejar de ser un país tercermundista en cuanto a distribución (legal) se refiere?
Still Walking: Invocar el fantasma de Yasujiro Ozu es casi un acto sacrílego, una temeridad del crítico o del realizador que no suele estar justificada. Aun así, en los últimos tiempos, parecen ser muchos los directores que se miran en el espejo del maestro japonés e intentan dar con las claves de un cine que, año tras año, va aumentando su importancia en el imaginario cinéfilo. Puede que el ejemplo más célebre sea el de Hou Hsiao Hsien que en su minimalista Café Lumière supo actualizar desde una óptica personal los motivos temáticos y visuales del responsable de Cuentos de Tokio para celebrar el centenario de su nacimiento (...)
A ciegas: Recuerdo con cierta perplejidad el revuelo que levantó en los medios de comunicación el estreno mundial de A ciegas. La novela original de José Saramago (publicada en 1995) había cosechado, en general, buenas críticas y pocos habían puesto en cuestión su presunta ética en el tratamiento de la ceguera. La plasmación cinematográfica de Fernando Meirelles —recibida con una considerable frialdad en Cannes— despertó, sin embargo, la ira de la Federación de Invidentes estadounidense que llegó a manifestar, a través de su director ejecutivo, John Paré, que «tanto el libro como la cinta tratan a los ciegos como incapaces de hacer cualquier cosa e incluso como adictos y criminales» (...)
Octubre: Hubo un tiempo en que el cine servía para levantar acta, para dictar sentencias e imponer ideologías a las masas. Sucedió con los más grandes del mudo, con Leni Riefenstahl, con David W.Griffith y, obviamente, con Sergéi Eisenstein. Pero también, con más sutileza, en los géneros clásicos del sonoro. Sin ir más lejos, estimar la importancia ideológica de los westerns es, hoy por hoy, una obviedad. Para bien y para mal, la tendencia se ha difuminado con el paso de los años y en estos tiempos de pensamiento débil son pocos los cineastas que sustenten sus propuestas en una tendencia política clara. Quizá las grandes producciones del presente no sean inocentes (detrás de ellas, siempre suele verse un modo —generalmente conservador— de entender el mundo), pero ya no se busca transformar la sociedad (...)
La duda: Los prejuicios (o las expectativas, si prefieren) suelen condicionar en exceso el visionado de (casi) toda película. Lo intentamos. Pero por mucho que huyamos de las impresiones previas, éstas acaban influyendo notoriamente en nuestra valoración final. En ocasiones, tan sólo tenemos un dato (las nominaciones o los intérpretes, por ejemplo) o una imagen (o un cartel) del filme en cuestión y, aun así, no podemos resistirnos a presagiar y a intentar encuadrar en un contendedor (genérico o no) lo que vamos a ver a continuación. Eso puede suceder, sin duda, ante una película «de prestigio» como la que da pie a este comentario (...)
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